Vinos Bodega Carchelo

Bodegas Carchelo, fundada en 1990, se asienta en Jumilla (Murcia) a los pies de la Sierra del Carche.

Viñedos

Situada en la zona oriental de la cordillera bética, a 80 km del Mediterráneo y una altitud media de 600 metros sobre el nivel de mar, Jumilla presenta un clima mediterráneo continentalizado de carácter semiárido. Tiene también una pluviometría muy irregular que ronda los 300 litros anuales, en su mayor parte en las estaciones de primavera y otoño, dándose en ocasiones de forma torrencial y acompañada con relativa frecuencia de granizo.

Los viñedos de Bodegas Carchelo se ubican en parcelas repartidas por el término municipal de Jumilla. Con esto se ha disminuido el riesgo de pérdida por pedrisco del total de la cosecha y además proporciona variedad en tipología de suelos, altitudes y orientaciones en laderas o hondos; las diversas ubicaciones nos permite una vendimia escalonada y disponer de uvas con gran diversidad de matices.

Suelos

Los suelos son calizos con baja materia orgánica y con un buen drenaje en superficie, pero con adecuada retención de agua a medida que se profundiza. Suelos con gran capacidad hídrica y mediana permeabilidad que permiten subsistir a la viña en condiciones de sequía prolongada aprovechando bien el poca agua disponible; poseen textura franca y franco-arenosa.

Clima

El clima mediterráneo unido a una ubicación interior y en meseta proporcionan una climatología singular. Humedad relativa media anual de 60%, 3.000 horas de sol al año, altitudes que van desde los 485 m. hasta los 1.372 m. y muy baja pluviometría, con años que no superan los 20 días de lluvia.

Los principales factores climáticos que configuran el tiempo en Jumilla vienen marcados por la incidencia directa del anticiclón de las Azores, la proximidad al norte de África y el Mar Mediterráneo y la acción del frente polar atlántico.

Es característica la escasez de lluvias a lo largo del año, con un mínimo muy marcado durante el verano. Microclima seco donde abundan días de viento y sol.

La diferencia térmica entre las máximas (verano, hasta 45 ºC) y las mínimas (invierno, hasta -5ºC) son muy pronunciadas; también entre el día y la noche, llegándose a producir, en verano, diferencias de hasta 20ºC.